A lo largo de la historia los avances en materia educativa se han considerado prudentes de acuerdo a las características del entorno, en el cual, fueron planteadas. Es por ello, que en el presente apartado se retoman dichos cambios y los elementos que han permitido que todas esas modificaciones se lleven a cabo y en esencia se pueda hablar en una educación por competencias.
Primeramente es necesario definir que la educación por competencias no implica sólo crear individuos capaces de generar resultados con el mínimo de esfuerzo, sino engloba que los productos lleven impresos distintos elementos de calidad. Es decir, engloba conocimientos, habilidades y destrezas las cuales deben estar equilibradas para poder establecer una competencia. En el caso de que alguna de estas rompa con ese equilibrio se estaría quebrantando uno de los principios generales de este tipo de educación.
He ahí la importancia de analizar las políticas educativas que se han planteado para mejorar las problemáticas que aquejaban el desarrollo de la educación, pues muchas de éstas no se han cumplido en su totalidad debido a que existen intereses de particulares que evitan que éstas se presenten de manera satisfactoria, tal es el caso de la reforma al artículo tercero donde se establece una educación laica, gratuita y obligatoria, lo cual muestra que gran parte de la población no cuenta con los conocimientos necesarios para poder integrarse en el terreno laboral, eso sin mencionar el gran número de analfabetas y analfabetas funcionales.
Otro de los obstáculos que se presentan es la llamada fuga de cerebros, que dejan entrever la falta de táctica por parte de los gobiernos para garantizar que las potencialidades de algunas personas se exploten a tal grado de aportar grandes oportunidades de desarrollo, lo cual en el mejor de los casos los obliga a emigrar a otros países donde se les brinde el apoyo necesario o en su defecto se convierten en personalidades frustradas que con tanto potencial tienen que dedicarse a otra actividad laboral para poder sobrevivir.
Es que acaso la educación no cumple con los elementos necesarios para brindar las herramientas que permitan cumplir con las exigencias de la sociedad actual y poder ser verdaderamente una sociedad del conocimiento, es ineludible replantearse la importancia que representa la educación para cualquier desarrollo.
Sin embargo, no todo ha sido catastrófico, pues de acuerdo con los cuatro pilares de la educación (aprender a hacer, aprende a conocer, aprender a convivir en sociedad y aprender a ser) ahora los beneficios no son únicamente de las personas que logran concluir sus estudios de manera satisfactoria, es decir, los verdaderos alcances que se tengan se verán reflejados en las modificaciones que cada persona sea capaz de hacer en el entorno que se desarrolla y en las personas que lo rodean.
Es por ello que la educación debe adquirir un carácter multicultural que al combatir las desigualdades sociales también subsane las necesidades de universalidad, en la cual los conocimientos adquiridos pueden ser aplicados en cualquier momento y espacio y donde sus efectos puedan aportar al desarrollo social.
Para ello, es necesario que el profesional en la educación sea concebido como un profesionista inacabado, que se encuentra en constante aprendizaje según el propio proceso lo requiera y que cuenta con las herramientas necesarias para tomar las decisiones adecuadas que le permitan afrontas las problemáticas a las que se enfrenta día con día.
De acurdo con lo anterior, me atrevo a afirmar que no existe ninguna teoría que pueda satisfacer en su totalidad todas las complejidades que acompañan a la educación, sino que de ellas se tiene que tomar los elementos necesarios que en conjunto puedan representar alternativas de solución.
Después de haber analizado la interior, es necesario replantear preguntas como si ¿es mejor implementar estrategias que garanticen avances educativos o es necesario primeramente solucionar los problemas existentes para que las nuevas propuestas no se vean obstaculizadas? Es seguro que las respuestas varían según el punto de vista, pero lo ideal sería atacar las dos problemáticas en un mismo tiempo.
En conclusión, las estrategias educativas en su aplicación no sólo implican a los gobernantes, sino al mismo tiempo engloba a los docentes, alumnos y padres de familia, la tarea es evitar que los docentes caigan en el confort de decir que como no se les brindan los recursos necesarios ellos hacen lo que pueden pues en esencia los responsables directos son todos ellos.
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